Cómo ser profesor de educación física.

Los profesores de educación física son los docentes encargados de la enseñanza del Deporte en los centros de Educación Secundaria, abarcando desde los primeros cursos de primaria hasta la FP de Grado Superior y los estudios universitarios. Su formación integral les permite enseñar a niños y jóvenes sobre las diferentes disciplinas deportivas y bienestar físico. ¿Quieres saber cómo ser profesor de Educación Física?

¿Qué hace un profesor de educación física?

La principal función de los profesores de educación física es la enseñanza y el fomento de las prácticas deportivas saludables. Para ello, deben programar, organizar y coordinar las diferentes actividades deportivas que se enseñan en cada curso según la programación del Departamento de Educación Física de cada centro de enseñanza. Asimismo, deben proporcionar una visión global sobre las diferentes prácticas deportivas a nivel técnico y práctico.

Los docentes también tienen una importante labor psicológica con sus estudiantes y es que deben fomentar actitudes positivas hacia el deporte como el juego limpio, el trabajo en equipo o la voluntad de superación personal. Además, deben fomentar una preocupación sana por el bienestar físico de los estudiantes. Por último, son los responsables del cuidado del material deportivo de cada centro y de las instalaciones para la práctica de deporte durante las horas lectivas de su asignatura.

Perfil

Una de las características imprescindibles para cualquier docente es la pasión por la enseñanza y la voluntad de adaptarse para transmitir sus conocimientos al alumnado. Por ello, los profesores de educación física tienen que disfrutar pasando tiempo con niños, adolescentes y jóvenes ya que son un colectivo que interacciona mucho con sus estudiantes. Asimismo, deben tener empatía con los demás para motivarles en la práctica del deporte y el estudio de las técnicas de cada disciplina.

Si bien no es habitual, los alumnos esperan que sus profesores de educación física se impliquen activamente en la práctica de deporte, sirviendo de ejemplo o desarrollando algunas actividades con ellos. Así pues, tener energía y ser sociable son unos requisitos imprescindibles desde el punto de vista del alumnado. Por último, pero no menos importante, un buen profesor de educación física debe sentir pasión por cualquier deporte y tener excelentes habilidades en la práctica de estos, algo fundamental que debe intentar transmitir a su alumnado.

¿Cuánto gana un profesor de educación física?

El sueldo de los profesores de educación física depende de la etapa y la titularidad del centro en la que impartan sus clases. Así pues, el sueldo de un profesor en Primaria en el sector público puede llegar a los 1.400 euros netos mensuales mientras que sus compañeros que imparten clase en institutos públicos pueden alcanzar salarios de hasta 1.800 euros netos mensuales; en ambos casos cuentan con pagas dobles sean interinos o funcionarios.

En cambio, los compañeros de centros privados tienen una mayor disparidad en sus salarios, siendo 1.500 euros netos mensuales la media salarial de estos profesores de educación física. Asimismo, los docentes que se encargan de impartir enseñanzas deportivas en el sector universitario tienen una base salarial de 1.100 euros mensuales más complementos si ejercen como docentes titulares, pudiendo ser menor si trabajan como profesores auxiliares.

Qué estudiar para ser profesor de educación física

Si te preguntas qué hay que estudiar para ser profesor de educación física, debes tener claro que la formación universitaria es imprescindible para acceder a este empleo. Los titulados universitarios en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte son los únicos que cuentan con la formación mínima para poder trabajar como docentes en Primaria, Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional o en la Universidad.

Además de contar con este grado o licenciatura, es necesario superar con éxito el Máster de Formación del Profesorado en especialidad de Deporte. El acceso al máster se realiza en función de la nota de expediente obtenida en la titulación de Grado o Licenciatura; que en estas especialidades suele situarse entre los 6 y los 7.5 puntos en función de la universidad que lo imparte.

Para ser admitido en las listas de interinos es imprescindible tener este postgrado aunque en algunas comunidades autónomas sólo será necesario acreditarlo antes de 3 años de trabajo. Y si aspiras a convertirte en profesor funcionario es necesario superar las oposiciones en la especialidad deseada.